lunes, 17 de enero de 2011

OT2011: los nuevos, el enchufado y la intrusa




No sé si esta nueva aventura de comentar el nuevo reality de telecinco va a llegar a buen puerto. Primero porque me puede quemar estar pendiente de lo que sucede en dos realitys de una manera simultánea. La verdad es que siempre he tenido mis dudas sobre si era prudente empezar Operación Triunfo cuando a Gran hermano aún le queda la mitad. La segunda razón que me lleva a pensar que no termine de comentar OT es su casting. No es que esta generación que nos presentaron ayer sea mala, más mala que la anterior es imposible, pero tampoco convenció tanto como se nos prometía. De cualquier modo, pido disculpas anticipadas por si mi interés hacia OT va bajando estrepitosamente hasta ignorarlo, como sucedió en la anterior edición.

Todo sabía a nuevo. Nuevos profesores, nueva presentadora, nuevo jurado y nuevas caras… Todo lo que OT necesitaba tras el sonoro fracaso de la séptima edición. Había pasado más de un año y medio desde que ¿Mario? cerrase la academia y tal vez todo cabía indicar que éste era el momento perfecto para que todo se reiniciase. OT requería de un profundo lavado de cara que se saldó con las salidas de los culpables de haber sido ensuciado: Risto Mejide, Ángel Llacer y Jesús Vázquez.

Ayer ya vimos a sus sustitutos en acción. Vimos a Pilar Rubio ocupando el puesto de presentadora, más acertada al inicio que al final. La antigua reportera de “Sé lo que hicisteis” empezó con mucha fuerza y con un toque de frescura que fue perdiendo a medida que avanzaba la gala, hasta el punto de verla torpe cuando a su lado estaban los candidatos a no entrar en la academia, equivocándose con los teléfonos, en la organización… En los momentos de máxima tensión, la Rubio no estuvo a la altura. Aunque la disculpamos por ser la gala cero de un programa de más de tres horas de duración, repleto de público y plagado de publicidad.

Entre las caras nuevas llegaron las más importantes, la de los concursantes, volviendo a una generación algo más adulta. No estamos ante el patio de colegio de OT7. La octava edición juega con un perfil algo más amplio, con un grupito de veinteañeros pero también con un rincón para unos casi treintañeros que dan un toque de color y distinción. Además hemos podido ver a muchachos diferentes, y no una serie de marcas blancas a los que OT fuera a colorear con los mismos tonos. No, parece que, al menos éstos tienen algo de personalidad al margen de si son o no buenos artitas. El problema fue que tampoco demostraron ser muy grandes sobre el escenario. Algunos intentaron innovar tanto e impregnar los temas de su estilo que quedaron emborronados como algo raro que no sabíamos identificar qué era. Otros, por la contra, manifestaron las mismas debilidades que año tras año vemos en el concurso musical. Pero están ahí para aprender, por lo que con los meses lo mismo descubrimos un verdadero artista. De eso va el concurso.

Para mí de esta nueva generación el mayor problema está en uno de los chicos. El enchufado de la edición Jefferson, o mejor dicho Mario como ya le conocíamos muchos. Eva Perales ha entrado en el jurado de OT con mal pie, con un descaro imposible. Hace tres años Cuatro emitió la segunda edición de Factor X, dónde ella hacía del miembro del jurado encargado de la categoría de los chicos. Y ¿Quién estaba en esa categoría? Pues Mario, o Jefferson, como quiera llamarse ahora. Un descaro casi sin precedentes. Lo peor de todo es que Mario no fue un gran artista entonces, y tampoco parece que haya cambiado algo ahora. Personalmente, y debido a este claro síntoma de enchufe, preferiría que la estancia de Jefferson fuera lo más corta posible dentro de este OT. Él ya tuvo la oportunidad de venderse en prime time y no resultó ¿Por qué iba a ser distinto? ¿Qué le une a Eva Perales para que esta mujer le vuelva a colocar en un programa de talentos musicales?

La última sorpresa estuvo en el regreso de un antiguo alumno de la academia. Algo así cómo OT el reencuentro, dónde Geno de la primera edición volvió para reencontrarse con la academia. Es la primera repescada entre ediciones, o mejor dicho, la intrusa de esa generación. Dudo mucho que sus compañeros la salvasen ante una nominación, incluso apostaría por cierto recelo ante la “popularidad” que Geno ya lleva recorrida. Aún así me emocionó verla de nuevo, me emocionó ver cómo se emocionaba. Vi a una Geno más mayor pero que no desentona con esta edición, una Geno humilde y muy agradecida por la oportunidad de disfrutar lo que no pudo entonces.

Por último, los expulsados y nominados. Perdimos a Kocina por el camino, posiblemente el concursante que menos pegaba con esta edición. También perdimos a Alexxa, la legionaria de OT que no vio materializado su sueño. En la otra cara de la moneda, nos hemos quedado con Coraluna (Sí, alguien tenía razón. Este año todos los chicos tienen nombre de Pokemons), una invidente que cantar no cantó mucho, la verdad, pero despertó la ternura en la audiencia para que pudiera entrar. La alegría le duró poco, el jurado la nominó nuevamente más conocer su nombre (¿Estaremos ante el inicio del fenómeno? A la audiencia nos pirra ir en contra del jurado). Coralina salió nominada junto a Sira, una especie de Ruth Lorenzo y Saray de OT5, y parece que una de ellas dirá adiós en la próxima gala (De fecha de emisión desconocida) Respecto a los demás, poca luz entre tanto eclipse. Las promesas de la vuelta a la esencia quedaron en poco. Tal vez lo único que nos recordó a OT1 fue Nina, y Geno –por supuesto-.

3 comentarios:

  1. Hola Roberto.

    Yo también me quede out con el uevo OT, eso si lo aguanté hasta el final.

    No es extraño que Pilar Rubio se fuera desinflando poco a poco, tanta publicidad y tanto corte desubican a cualquiera, y se diga lo que se diga no es lo mismo MQB que OT.

    O sea que Jeferson es enchufado de Eva? Pues menos mal que no ha metido a concursantes de "LLuvia de estrellas" o comos e llamase, el concurso de cantar de la sautonómicas donde fue jurado con Soraya e Iñigo.

    Se decía que los chicos, incluyendo la ganadora (mañica ella y de mi antiguo barrio) se presentaban al casting de OT, pensé que era demasiado cuando vi a Eva de jurado.

    No se qué pinta Geno en OT la verdad, y claro que creará recelos.

    De la gala me quedo con Silvia Romás, Naxo y Moreiba. (joer que nombrecitos tienen algunos).

    Nuestra nueva Janis Joplien me encaaaaannnnta.

    Un cero por plasta a Fernando Argona y una calabaza con cuernos a Rafa Sánches por sus tonterías y por soltar lo de la pluma a Romil (o como sea) lo del color negro como si fuera un souvenir a Juan y lo del cuerpo de la filipina.

    Vaya dos patas pa un banco.


    Y tienes razón, va a ser muy cansao seguir dos realitys.

    besicos.

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  2. Pues a mi me tiene indignada la readmisión "by the face" de Geno. No entiendo los motivos que dan para que esté en la academia otra vez /dicen que porque no tuvo casi oportunidad y que solo estuvo una semana en la academia. Qué pasa, que tiene más derecho que los primeros nominados en cada edición de OT? no tuvo las mismas oportunidades que los demás? Todos los primeros nominados estuvieron solo una semana!! Para mi que hay gato encerrado en esto, no saben como relanzarla y han visto en OT8 la puerta de la lanzadera abierta. No me parece justo. No tengo nada en contra de Geno, ni me gusta ni me disgusta, sino en contra de la organización de OT, pero si que es verdad que para tener ya los añitos que tiene, la he visto muy niña, llorando, tímida. Esperaba ver a una persona ya madura y con tablas, no noto diferencia entre Geno en OT1 y Geno en OT8, la verdad, bueno sí, que está bastante más delgada y "algo" más guapa.

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  3. La readmision de Geno fue símplemente para dar un argumento a la gala, un aliciente para ver dónde llega. Que además sea de la primera edición daba un morbillo adicional (Ya que evidentemente Rosa, Bisbal o Chenoa no iban a entrar) Tampoco es que sea muy buena cantante, por lo que tarde o temprano caerá. Gracias a los dos por pasaros por esta "casa"

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