martes, 15 de mayo de 2012

Pepe, tercer finalista

Pepe, el lider.

Pepe ha conseguido su plaza a la final en la primera oportunidad que ha tenido. Lo ha conseguido con un porcentaje desconocido, primera vez que se omite este dato en esta edición, lo que me lleva a pensar que ha ganado a Sindia, su principal oponente por la tercera plaza, con una holgada mayoría. El Gato ya lo comentaba hoy en su escrito diario, y es algo en lo que coincido. Si lo han omitido es porque no quieren que sepamos el poder que ha concentrado.

Los seguidores de Pepe nos hemos lanzado a la batalla por esa plaza como bien indiqué el viernes pasado: como si fuera la última plaza disponible. E hicimos bien aunque no tardamos en tener la confirmación de lo que muchos sospechábamos. Este año la final se la jugarán cuatro concursantes, y por tanto aún quedaba una oportunidad para entrar en el loft de los finalistas, que se rifará en la falsa final que están preparando para este jueves.

Hugo y María optan por ocupar esa plaza por cuarta ocasión, Sindia es la segunda… Efectivamente todos han tenido más de una oportunidad para entrar. Lo cual tampoco significa que haya sido un mecanismo justo, como bien se puede entender al comprobar las veces en las Hugo y María han podido ganar frente a las oportunidades de Sindi. Tampoco ha sido un mecanismo justo si tenemos en cuenta que el orden de los finalistas elegidos ha determinado qué mochila cogían. Está claro que Aless pudo elegir como mochila la más bonita, la más pesada, la más rota o la más nueva. Dani pudo elegir entre un buen abanico de posibilidades, si bien la mochila bonita ya se la había llevado Aless… Pues bien, a Pepe le quedaban las feas, las rotas, las pesadas, y Mary Joy (mochila invisible para esta ocasión). ¿Qué hubiera pasado si el sistema justo hubiera permitido que todos los concursantes tuvieran opción por ocupar la primera plaza? ¿Habría tenido Pepe la posibilidad de elegir primero qué mochila llevarse?

Antes de comentar la polémica decisión de Pepe, alterada por las indicaciones de amigos y familiares, he de decir que su entrevista me pareció de las más flojas de las tres que llevamos. Si la vez que estuvo en esa sala insonorizada frente a Aristidín, aún sin saber quién sería el expulsado, vi a un Pepe guerrero que se llevó la jugada en un 10 a 0, ayer vi a un Pepe derrotado, dubitativo y desorientado. No vi a ese Pepe que por ejemplo dice que Gato que vio. Su capacidad de rebatir a los reventados, más reventados si cabe que en otras ocasiones, fue inferior a la que tuvo cuando se enfrentó al tontín de los 69100 euros. Apenas supo defender esa verdad en la que yo creo firmemente, y dejó que se fueran vertiendo mentiras sin preocuparse ya por la imagen que tanto ha querido proteger. Posiblemente porque sí se creía expulsado, y por tanto entendía que el juego había finalizado. Estaba más centrado en entender por qué estaba ahí que en defender la postura que ha mantenido durante todo este tiempo.

Pepe ha sido un gran líder de un bando de la casa. Una persona carismática, con magia y con mucha determinación. Durante estos meses ha sabido qué estaba pasando y no le gustaba cuando los suyos o los otros intentaban hacerle la cama afeándole ciertas conductas. Supo en todo momento adelantarse a esos movimientos muy traperos: como el de maltratador de animales o el de machista… por eso me sorprendió ayer verle tan apagado. Su estela de líder no brilló, aunque me pese decirlo.

Él ha sido un líder muy importante. Primero porque supo encontrar su lugar muy pronto, rodearse de la gente que le quería y los defendió en todo momento como si estuviera defendiéndose a sí mismo. Protegió a los suyos, aunque siempre sin olvidar que este juego debía resolverlo solo, y semana a semana consiguió que se fueran los contrarios. Pepe, como líder del bando, ya ha ganado. Por la puerta salió David, Aristidin, Verónica, Juan, Berta, Cristian, Ariadna… Estas últimas semanas la casa era una demostración de esa victoria, con Aless, Dani, María, Sindi, Hugo y él mismo. Con sus más y sus menos, ahí estaba un único bando, el vencedor, el bando de Pepe.

Ahora, la polémica está servida con la elección que hizo. Basta recordar, tal y como ya he dicho al principio, que Pepe tenía que elegir a su +1, o en este caso -1, entre las opciones que tenía. Todo esto con el poco tiempo que disponen para pensar con lucidez mientras miles de emociones avasallan tu cuerpo, a lo que hay que añadir a los familiares y amigos señalando la elección que tenía que hacer y el público entregado gritando más que nunca para que dijera el nombre de Noemí.

Siempre aposté por la elección de Mary Joy, aquella chica de origen filipino a la que echaron por bailar con Aless y ofender a Noemí (Fíjate, ¡¡a Joy la echaron por un baile!!) aunque siempre supe que la opción de Noemí estaba ahí. Al fin y al cabo se hacían llamar sus mosqueteros. Pero también creía que llegado el momento, y al ver que Aless no estaba presente, entendería que el italiano había descartado esta opción, y por tanto respetaría esta decisión (En caso de asumir que se reencontraría con él en breve). Por otro lado, el propio Pepe ya había calificado a Noemí como «chunga» y en su análisis de por qué echaron a Aless, entendió que fue por el morbo de los vídeos de Brasil. Por eso creí que no la elegiría. Pero me equivoqué.

Su familia y sus amigos le gritaron que eligiera a Noe. Ellos tienen toda la información de la que él no dispone, por lo que Pepe asumió que había fundamentos más que suficientes para que le instasen a escoger a la canaria. Puede que sea para que los seguidores de Noe se sumen a los de Pepe en la final o para que la presencia de la canaria desestabilice a Aless y rompa el aura de martirio que le envuelve. Sin embargo no han valorado la primera reacción que ha surgido a muchos.

Muchos de los que apoyamos a Pepe, no toleramos a Noemí, por tanto ¿Tenemos que votar por él y darle un reconocimiento a ella? Vale que la final será entre los cuatro. Los +1 son simplemente un recurso para dar vida a la recta final. El ganador será Aless, no Marta, o Pepe, no Noemí, o tal vez Dani, pero nunca Ariadna. Y eso lo entiendo, pero desembolsarme yo un dinero en SMS para que él gane y Noemí se lleve 20.000 euros como que no me hace ninguna gracia. Entiendo su decisión, pero no quiero dar ni un mínimo de reconocimiento a Noemí, por mínimo que sea. Y es que este año, el finalista va con mochila, y no todas son iguales.

Habrá que ver cómo se desenvuelven los próximos días, pero hoy por hoy no votaría por Pepe, sino por Aless. ¿Por qué? Porque los dos me caen bien. Admiro la fuerza de Pepe y empatizo mucho con Aless. Por tanto, para decidirme por uno de los dos observó también sus mochilas. Marta me encanta. Una niña guapa, positiva, alegre y muy divertida que jamás debería haber salido de la casa… La mochila de Pepe es la mentira, la soberbia, la chulería… Ufff, es que no puedo. Pesa más la mochila. Lo siento.  Ahora, que Aless aún puede volver a liarse con Noemí y entonces ya la liamos parda. Me veo votando como ganador a Pipi, ¡¡o a Dani!!

Si Pepe gana me alegraré, pero no serán mis mensajes quienes le den 20.000 euros a Noemí.

1 comentario:

  1. Yo voto ha Pepe pienso que Noemi no es un inconveniente el que es pepista lo es hasta el final, los que se cambian de bando no son pepista, para que votar a otro si no me gusta, y el +1 no tiene nada que ver, veo en el 24h mensajes que dicen a los mas uno ganadoras, pero si son expulsadas ex- concursantes, no nos engañemos...

    ResponderEliminar